Por: Alonso Quezada

Los trabajadores de las empresas tienen derecho a recibir una participación de las utilidades que se generaron en el ejercicio, como reconocimiento por su esfuerzo.

El reparto de utilidades es uno de los momentos más esperados por los trabajadores en el año, pues éstos reciben un pago por parte de las empresas para las cuales trabajan de hasta 3 meses de su sueldo. Esto se debe a que los trabajadores de las empresas tienen derecho a recibir una participación de las utilidades que se generaron en el ejercicio, según lo establecido en la Ley Federal del Trabajo, como reconocimiento por su esfuerzo. 

La cantidad a repartir es del 10% de las utilidades calculadas en la declaración anual del ejercicio correspondiente y se debe pagar a más tardar 60 días después de la fecha límite para el envío de la declaración anual, misma que fue el 31 de marzo para las personas morales y el 30 de abril para las personas físicas, por lo que el 30 de mayo y el 29 de junio son las fechas límite para el pago de las utilidades respectivamente. 

El cálculo para determinar cuánto dinero se le pagará a cada trabajador se basa en 2 aspectos: el total de días trabajados por cada uno de los empleados y el sueldo de los mismos. Es decir, el 50% de la PTU se reparte en base a los días que cada empleado trabajó, sin importar su sueldo. La otra mitad sí considera el sueldo de los trabajadores, pero no se toman en cuenta gratificaciones, percepciones y otros conceptos extraordinarios.

Son pocos los casos de empresas que están exentas de hacer el reparto de utilidades según lo establecido por la Ley. Algunos de estos casos son: las empresas de nueva creación  durante el primer año de operación, las empresas de la industria extractiva de nueva creación en su periodo de exploración, las organizaciones sin fines de lucro y algunas instituciones públicas descentralizadas.

También es importante señalar que los empleados de confianza como los administradores, gerentes y directores no tienen derecho a recibir PTU. Las trabajadoras domésticas y los trabajadores eventuales que no laboraron más de 60 días del ejercicio en la organización tampoco tienen derecho a recibir utilidades.

Los empleados que dejaron de formar parte de la organización durante el ejercicio también tienen derecho a solicitar su respectivo reparto de utilidades. Para hacerlo tienen como límite un año a partir de que la obligación sea exigible, de lo contrario esa cantidad se sumará a la PTU del ejercicio siguiente y se repartirá entre los empleados.

La recomendación es consultar con un contador la declaración anual de su empresa para determinar el correcto resultado fiscal del ejercicio y después calcular el 10% de PTU que se repartirá a sus colaboradores para evitar pagar una cantidad superior o inferior a la requerida y evitar multas u otros problemas futuros. 

De igual forma la administración de su negocio deberá tener previsto en su flujo este compromiso con sus empleados y también en sus proyecciones financieras considerar que el 40% de la utilidad del año va a caer en manos de terceros: 30% en impuestos para el gobierno (tratándose de personas morales) y el 10% para los trabajadores por concepto de PTU.

 

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